martes, 20 de abril de 2010

El Jenízaro


Los maderos no miran diferencia entre el jenízaro y el guanacaste. Dicen que son casi la misma cosa, el jenízaro es un poco más pesado pero casi se confunden. Bueno, un carpintero no los confunde. Un carpintero Tucuantepeño, nos dice: Mire, hermano, para nosotros los carpinteros, el guanacaste y el jenízaro son tan diferentes, como la cola y la cabeza de un gato. El guanacaste recién aserrado tira un tufo feo y el aserrín puede afectar la piel. El jenízaro no es tan desagradable.

Ahí mismito, comienza la diferencia. Yo, como buen carpintero sólo uso madera seca. El guanacaste es incomodo de secar a veces se te raja todito. Mira, una tabla de guanacaste ya seca te la llevás tranquilito en una mano. Pero una tabla igualita de jenízaro, la tenés que agarrar con las dos manos. Es que le pesa el cuchumbo. Y cuando las trabajás, ahí sentís la diferencia entre uno y otro.

El guanacaste tiene fibra encontrada y sus colores son más escandalosos de café oscuro, casi negros, hasta blanco con un jaspe bien marcado. El jenízaro es más parejo tiene un jaspe fino y sus colores más rosados son menos escandalosos. Y si los metés a la cepilladura o a la canteadora, el guanacaste levanta pelo y no queda terso.

Cuando metés el jenízaro, al motorcito te grita: “… suave, suavecito loco…” y las virutas salen cortitas y quebradas, pero queda liso terso. Lo que no aguanta ninguno de los dos, es el contacto directo con la tierra. Se pudren muy fácilmente, si no están bien curados.

Parece, que son un plato especial para el comején, polilla, hongos y la hormiga negra. Pero en dos cosas son igualitos: los dos aguantan por igual el contacto con el agua. Pareciera que le encanta estar flotando en el agua. Por eso se usan mucho en las construcciones de barcos, picantes y cayucos. Para mí, dice el carpintero, el genízaro es una madera superior, más estable y más dura. Así, lo miro yo, opina el carpintero de Ticuantepe, ¿Y usted amigo, cómo lo mira?

Aquí colgaron al Nagrandano

En Nagarote hay un parque bonito, que es conocido como el del jenízaro. Ahí está el monumento de gratitud al presidente Zelaya, por haber terminado el ferrocarril. Con un tronco que ya va por las 4 varas y unas ramitas de 2 varas de diámetro se le nota su edad.

Ese árbol ha visto pasa toda la historia del país. En esas ramas, los españoles, colgaron al cacique Nagrandano, por oponerse a la colonia y luchar por los derechos de su pueblo. Nagrandano en lengua nahualt significa “Camino Largo”. Ejecutaron al Nagrandano, para poder fundar el Nagarote español alrededor del jenízaro y del río Santiago. Los españoles tenían algo que se llamaba la diligencia. Las diligencias eran carretas de caballos y sus dueños, se reunían bajo jenízaro para arreglar los negocios de la zona. Era un lugar de negocios, pues.

Allí los de occidente del país cambiaban maíz con los de Rivas, o sea con los del sur, que producían el fríjol y el cacao. Aquí los indios vendían tiestos de barro y las bellas joyas trabajadas en oro. El jenízaro siempre fue el centro de la vida en Nagarote. Hasta las guerras pasaron encima de él.

Ese palo, es conocedor de la historia, no sólo la de Nagarote. Conoce la historia de Nicaragua entera. En 1952 se formo el grupo que se preocupa de cuidar y mantener el jenízaro. En 1964 se logró que el jenízaro lo declararan monumento nacional. Es que, con el tiempo el parque del jenízaro se volvió como un punto turístico para Nagarote. Vinieron gentillales, de gente de afuera, sólo para visitar el árbol, que tal vez, es el más viejo del país.

Así, el jenízaro como atracción turística no deja de atraer rialitos para Nagarote. A pesar de todo, ni los gobiernos ni los alcaldes nunca se preocuparon por nada. El huracán le quebró su corona. El animalero que tiene, se lo está comiendo por completo. Tiene todo, comejenes, hormigas negras y avispas. Además le pegaron unos cables eléctricos como si fuera un poste de luz, así lo están sacando poco a poco. Y para colmo, le pusieron unos juguetes infantiles debajo del jenízaro nuevo, que está rebotando de las mismas raíces del árbol viejo.

No hay comentarios: